Algunos de mis amigos entre tantos amigos del Colegio Club de Leones

sábado, 25 de septiembre de 2010

ASI SE APRENDE

La revista Semana publicó el 18 de septiembre de 2010, el siguiente artículo.

Si le pregunta a un estudiante cuál es su técnica de preparación para un examen, probablemente contestará que estudiar todo el día antes de la prueba. Este método puede darle buenos resultados, pero está errado a la luz de nuevos estudios, los cuales señalan que es más efectivo aprender poco a poco cada día que todo de una sola sentada. SEMANA habló con el experto Nate Kornell, doctor en Psicología del Williams College, sobre estas nuevas técnicas. El experto dijo que es mucho más duradera la información que se procesa de manera espaciada en el tiempo y si se mezcla con otros temas. “Pasar de un tema a otro cada media hora y cubrir todos los temas que vio cada día es más efectivo que sumergirse en un solo tema un día entero”, dice Kornell.

Sin embargo, advierte que una cosa es aprender y otra producir. Para esto último, concentrarse en un tema es la mejor salida, pero no si el objetivo es aprender. “La razón es que la inmersión no permite que el cerebro tenga el espacio suficiente para aprender”, explica. Estas son cuatro de las técnicas que él recomienda.

1. Cambie de lugar: La mayoría cree que debe escoger siempre el mismo sitio para estudiar. Sin embargo, desde 1978, los psicólogos han ido acumulando suficiente evidencia para afirmar que los estudiantes que cambian de escenario para aprender recuerdan más que aquellos que permanecen en un mismo sitio. Según Kornell, hacer esto ayuda a que el cerebro asocie el contenido a diferentes señales del ambiente, como el color de la cortina. “La gente no estudia en el salón en que lo van a examinar, por eso tener una variedad de señales ambientales hace recordar más fácil lo aprendido”, dice, aunque advierte que esta técnica puede hacer más difícil la concentración. Un experimento encontró que los universitarios que debían aprender una lista de 40 palabras y lo hicieron en dos habitaciones diferentes tuvieron mejores resultados que quienes estudiaron en un solo recinto.



2. No se concentre en una sola temática: Se ha demostrado que si las personas aprenden de un tema similar al mismo tiempo, mejoran su desempeño en los exámenes, contrario a lo que hacen los manuales de matemáticas y ciencia, que organizan su contenido en temáticas específicas. “Fraccionarios en un capítulo, luego decimales y así, pero la gente aprende más cuando se mezclan diferentes temas al tiempo”, dice Kornell. Un estudio mostró que los jóvenes y adultos tenían más capacidad de distinguir las pinturas de 12 artistas luego de ver sus obras mezcladas, en lugar de concentrarse en un maestro y luego en el otro. Según el especialista, en esta situación, el sujeto debe revisar su nuevo conocimiento y resolver problemas relacionados, de diferente manera.



3. Espaciar el aprendizaje: Los expertos han hallado que lo ideal es dividir las horas de estudio. Kornell dice que no se debe leer el capítulo dos veces el mismo día. “Léalo un día y revíselo otro y deje que pase mucho tiempo entre esos dos momentos”, enfatiza. No hay que estudiar más sino distribuir el tiempo de estudio.“No es suficiente con aprender algo sino que debemos volver a aprenderlo varias veces, hasta que se quede realmente en la memoria”, señala Kornell. Explica que mientras más se espacien los eventos de estudio más olvido habrá, y mientras más se olvide más aprendizaje se produce, porque el olvido es el mejor amigo de la memoria.



4. Los exámenes ayudan: Los estudiantes los odian, pero los científicos han encontrado que las pruebas en medio del estudio ayudan a fijar la información. Henry Roediger, de la Universidad de Washington en St. Louis, Estados Unidos, hizo un experimento con universitarios, a quienes les pidió que estudiaran un artículo de ciencia. Un grupo repasó el material dos veces y enseguida fueron sometidos a un examen en el que salieron bien librados. No obstante, pronto olvidaron la información. A los otros se les dio solo una sesión de estudio y un examen de práctica, y a los dos días aún sabían sobre el tema. Según Roediger, mientras más difíciles sean las pruebas más esfuerzo mental habrá y, por lo tanto, mayor garantía de que la información se fijará a largo plazo.



Douglas Rohrer, de la Universidad de South Florida, asegura que la razón por la cual estas técnicas son desconocidas es que los estudios en el campo son recientes y “toma mucho tiempo para que la investigación se aplique en el aula de clase”, explica. Agrega que en la educación no pasa lo mismo que con la medicina, en donde los expertos se basan en nuevos procedimientos y drogas que han sido exitosas en los estudios científicos. “Por eso la medicina ha mejorado tanto en los últimos 100 años, mientras que la educación no. Aún los profesores se valen de teorías que no han sido comprobadas, o en modas”.

Amamos la vida y nos preparamos para ser útiles a la sociedad y a nosotros mismos.

HONESTIDAD

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